El entorno profesional es cada vez más complejo y cambiante debido, en gran parte, a la globalización, la digitalización y la irrupción de la inteligencia artificial. Los jóvenes que hoy están en la escuela deberán desarrollar competencias transversales demandadas por el mercado laboral y prepararse para profesiones que aún no existen. En este contexto, la orientación desempeña un papel fundamental para que los centros puedan preparar a los estudiantes para desenvolverse con éxito en el mundo profesional.

Desde la Fundación Bertelsmann apostamos por una orientación profesional temprana, continuada y de calidad que acompañe a los jóvenes en la toma de decisiones académico-profesionales y les ofrezca oportunidades de participar en experiencias en entornos de trabajo reales durante su etapa educativa.

Para ello, impulsamos el modelo Xcelence: un marco de referencia que permite a los centros implementar mejoras en sus sistemas de orientación, inspirado en prácticas de referencia internacionales, que pretende posicionar la orientación como un elemento estratégico en los centros educativos, implantar una nueva figura profesional en el ámbito de la orientación académico-profesional, y acercar el mundo educativo al profesional.

Para conseguir que la orientación ocupe el lugar de relevancia que se merece en el sector educativo, empresarial, y la sociedad en general es necesaria la implicación y colaboración de diferentes agentes (centros educativos, familias, administración pública, empresas, asociaciones sectoriales y otras entidades). Desde la Fundación Bertelsmann actuamos como facilitadores del cambio, poniendo nuestro expertise y experiencia al servicio de la sociedad y estableciendo vías de conexión y colaboración con todos los agentes clave.