El objetivo de este libro no es el de presentar un modelo de Gestión de la Diversidad Cultural definitivo, como si de una píldora mágica se tratase. Entre otras cosas, porque, y sobre todo, en un tema de calibre del que aquí se trata «ningún sistema puede pretender ser el único válido y definitivo». En lugar de presentar un paradigma que sirva como modelo a seguir, se ofrece un prisma, unas gafas que permitan entender la Gestión de la Diversidad Cultural en su total amplitud y profundidad, como punto de referencia y como guía.