La empresa como protagonista
en la orientación
La colaboración de empresas y centros educativos en la orientación profesional de los estudiantes es una relación de win-win que aporta beneficios a todos los implicados: los jóvenes pueden tomar sus decisiones con más probabilidades de acierto; los centros educativos cumplen mejor su función de preparar a los jóvenes para el futuro que les espera; las empresas orientadoras, mejoran su competitividad y su imagen de cara a la atracción de talento; generando así una repercusión positiva en la economía y la sociedad.
“En la mayoría de los países del centro y norte de Europa la orientación profesional está muy integrada y la sensibilidad de las distintas organizaciones en este campo es también muy alta”